Hay una gran variedad de problemas de visión hoy en día. Los más comunes afectan nuestra capacidad de ver nuestro entorno claramente y pueden corregirse con lentes oftálmicos. Aquí hay una breve lista para ayudarlo a entender mejor.
El ojo es una máquina con capacidades increíbles. Sin embargo, a veces puede fallar. Su funcionamiento óptico es complejo, de modo que incluso defectos menores pueden hacer que la visión sea borrosa o imperfecta. En México, casi 3 de cada 4 adultos tienen problemas de visión. Afortunadamente, lo más común puede corregirse fácilmente con micas oftálmicas
La Miopía
Idealmente, el ojo debería permitirnos ver claramente lejos sin ningún esfuerzo de enfoque. En otras palabras, la imagen de un objeto distante debe proyectarse sobre la retina sin ningún esfuerzo. Pero con miopía, el ojo es demasiado largo o demasiado “poderoso”, y la imagen del objeto se forma antes de llegar a la retina. Esta es la razón por la cual el miope percibe objetos distantes borrosos.
Para compensar este defecto visual, es necesario usar anteojos o lentes que compensen este defecto visual, ya sea anteojos divergentes o negativos que repelen la imagen del objeto en la retina.
Hipermetropía
La hipermetropía es lo opuesto a la miopía: el ojo no es lo suficientemente “poderoso” o demasiado corto, y la imagen del objeto se forma detrás de la retina. Como en el caso de la miopía, los objetos distantes deben verse borrosos. Pero solo en teoría, porque en el caso de la hipermetropía, el ojo generalmente puede hacer un esfuerzo para enfocar y reemplazar la imagen del objeto en la retina gracias a la acomodación. Por lo tanto, en la práctica, el hipermetrópico verá claramente lejos, pero el esfuerzo realizado en visión lejana se sumará al esfuerzo de enfocar en visión cercana. Así mismo, el hipermetrópico sufre más de alteraciones de la visión de cerca: fatiga visual, pérdida de concentración, dolor de cabeza, visión borrosa...
La corrección con anteojos o lentes convergentes monofocales alivia las alteraciones de la visión de cerca de la misma manera.
Astigmatismo
El astigmatismo es un defecto de refracción más complejo: se debe a desigualdades en la curvatura de las diferentes partes del ojo (córnea, Cristalino, retina etc.). En otras palabras, su ojo distorsiona los objetos: la imagen de un círculo, por ejemplo, tendrá una forma ovoide en la parte posterior del ojo, y su visión se verá borrosa y distorsionada a todas las distancias. Este trastorno de refracción a menudo se combina con miopía o hipermetropía.
Para corregirlo, se utilizan las llamadas gafas cilíndricas, lo que permite compensar las irregularidades en la curvatura.
PRESBYTIA
La presbicia es el resultado del envejecimiento natural del ojo. De hecho, con la edad, el cristalino se vuelve cada vez más rígido. Y si no causa un problema adicional para ver desde la distancia, agrega una dificultad adicional para enfocarse en objetos cercanos. Existen diferentes soluciones para superar este trastorno: el uso de anteojos (lentes) para leer o cualquier actividad a corta distancia, o el uso de lentes ópticos progresivos o multifocales, que corrigen la visión tanto de cerca como de lejos.